Este es un homenaje silencioso, pero profundamente elocuente, a las madres. La escultura muestra a una mujer inclinada hacia adelante, sosteniendo a sus hijos con ternura, mientras sobre su espalda lleva un peso imposible: lavadoras, cubetas, escobas, sillas, utensilios… símbolos de las múltiples tareas y responsabilidades que recaen sobre ellas.
Esta imagen es un grito visual sobre la realidad cotidiana de millones de madres: sostener a sus hijos con amor al mismo tiempo que cargan con el peso de la casa, el trabajo, las emociones y, muchas veces, las propias renuncias.
Esta es una reflexión con un mensaje claro de gratitud y empatía: las madres cargan más de lo que podemos imaginar, y aun así, siguen siendo refugio y amor incondicional.
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Dato curioso:
Esta imagen fue tendencia hace unos dias al indicarse que estaba en Barcelona y que pertenecía a un artista (cosas que fueron desmentidas al indicar que se trataba una imagen creada con IA).